Los y las socialistas que integramos el movimiento Fuerza del Territorio PS manifestamos la convicción de que el Partido Socialista debe definir su activa participación frente al escenario electoral de balotaje en las elecciones del 19 de noviembre del corriente año.
Estamos frente a un escenario de paridad entre dos fuerzas políticas que representan tangencialmente posturas contrarias, constituyendo una de ellas una disyuntiva brutal, que propugna como opción políticas que van en desmedro del pueblo y de la Nación, haciendo alarde de querer realizar un ajuste feroz que barre con derechos consagrados como la educación y la salud pública gratuita, que considera a la justicia social una aberración, al Estado como el máximo problema y al libre mercado más salvaje como ordenador de la sociedad; que hace gala del negacionismo más extremo, ya sea con el terrorismo de Estado que sufriera nuestro país o el calentamiento global; que plantea (otra vez!) el desguace del Estado, prometiendo privatizar desde el sistema ferroviario hasta Vaca Muerta; que promete cortar relaciones con Brasil, China y el Mercosur, respetar la “autodeterminación” de los kelpers respecto a la soberanía de Malvinas, garantizarle al ciudadano la “libertad de elegir” entre ser un trabajador precarizado o morirse de hambre; que proclama la libertad para armarse y comerciar órganos, considera la contaminación ambiental como algo lícito, que trata de excremento y de inmundicia al prójimo, y amenaza exterminar al que piensa distinto.
Como socialistas, y cuando se cumplen 40 años de democracia, no creemos que esa sea la salida que necesitamos como argentinos y argentinas. Del mismo modo que reivindicamos con orgullo que, en nuestra historia reciente, el Partido Socialista supo mantener su profunda coherencia ética e ideológica, cuando más allá del gobierno de turno y sin especulaciones electorales votó a favor de la estatización de las AFJP, de la Ley de Medios, de la reestatización de YPF y Aerolíneas, del Matrimonio Igualitario y la Interrupción Voluntaria del Embarazo, para citar algunos ejemplos, es que hoy manifestamos nuestro rechazo y oposición a las expresiones de una ultraderecha con tintes neofascistas que pretende gobernar nuestro país.
Abstenerse de tomar partido en la crucial coyuntura actual no es una opción posible para el socialismo, ya que contradice la historia de las luchas y posicionamientos, de valores e ideas que defendemos desde hace 127 años en nuestro querido país. Siempre posicionados del lado del campo popular, de las mayorías nacionales y de los intereses del pueblo argentino.
Esto no implica ningún renunciamiento futuro a seguir debatiendo y proponiendo las reformas que nuestro país necesita. Por el contrario, la gravedad institucional a la que estamos expuestos como país es también consecuencia de la gestión del actual Gobierno nacional, al cual le cabe la máxima responsabilidad de convocar al resto de la dirigencia política democrática para acordar, a través del diálogo y el consenso, una agenda política y económica que comience a saldar la enorme deuda social que padece nuestra nación.
Desde Fuerza del Territorio ratificamos que, como militantes socialistas comprometidos en la tarea cotidiana de transformar la realidad bajo los principios de igualdad, justicia, solidaridad que rigen nuestro ideario, defendiendo la consolidación de un Estado social y democrático, de derecho, federal y republicano, jamás podríamos permanecer indiferente frente a esta disyuntiva en la que se pone en juego los derechos más elementales de nuestro régimen democrático.